Playa para mi sola !

Necesitaba una salida como sea, me moría por ir a la playa, con este calor, ¿ quien no? .

El único problema es que yo quería cierta paz en la playa y ...bueno ya saben, con los heladeros, vendedores de chucherías, pan con pollo, los que alquilan sombrillas, cerveza helada ( esa no me la sabia) niños corriendo, etc, etc, lo ideal era salir un día de semana, pero, el detalle es que todo mundo esta ocupado, trabajando, mientras yo soy la única desocupada .

Así que, después de unos infructuosos intentos de conseguir alguien que me acompañe, decidí ir sola, nunca lo había hecho, siempre hay una primera vez para todo. Cogí mis chivas (bloqueador, ropa de baño, pareo y un gorro ) y tome un bus rumbo al sur . Me dormí en el camino y cuando desperté estaba pasando por las playas,  me bajé en una de las que conocía y camine .

No esperaba encontrar lo que vi, una playa ABSOLUTAMENTE vacía, es decir, no había nadie, solo estaba a mi alrededor los dueños de los restaurantes playeros, que apenas me vieron quisieron llamar mi atención como pudieron (único posible cliente del día ) pero para su mala suerte , llevé unas galletas y agua, era todo lo que quería comer, será para la próxima, lo siento !

A lo lejos veía al salvavidas mirando el mar, aburrido a mas no poder, lo supe por sus constantes bostezos  de rato en rato. La bandera roja ondeaba, ya que el mar de nuestra costa ha estado embravecido la ultima semana , efectivamente olas bravas y una mar revuelta por completo.

Me senté a tomar el sol y no pueden imaginar la sensación de tranquilidad que me invadió, el sonido del mar, el olor, el viento; el sol iba y venia pero para nada hacia frío .Me metí al agua, fresca pero no fría, me sumergí, mi piel se lleno de sal y de la refrescante sensación del mar.

Por más que intenté durante todo el día, simplemente no me pude concentrar en ningún pensamiento, mi mente estaba en blanco, mi cuerpo relajado, se fueron los problemas, las preocupaciones, no había nada más que la playa y yo . La segunda vez que me metí al agua, una ola traicionera me tumbo y arrastro varios metros , haciendome reír más que asustarme , me tomó desprevenida , ya que el agua solo me llegaba a las pantorrillas, a un poco más allá , el salvavidas se reía de mi ...

Estuve durante tres horas tomando el sol, respirando aquel aire, lejos de todo y de todos, me sentí ...feliz , creo; eso fue ...en eso unas gotitas de lluvia cayeron a mi alrededor, creo que no pudo ser más perfecto , una lluvia en la playa .

Lamentablemente como todo termina, empezó a oscurecer y hacía frió, así que recogí mis pertrechos y enrumbe al caos y el fastidio de la vida citadina, Cuando llegué a Lima llovía, no a cantaros, pero llovía bastante, fue el día de la dichosa primera lluvia del verano que muchos comentaron .


Adiós playa y adiós paz, por el momento al menos .