Es media madrugada, esoy lejos de casa y no se por que, han venido pensamientos a molestarme, soy en este momento como la cascara vacìa que se percata recièn que hay un hueco dentro de ella .
En fin, como toca escribir, dire algo que pensaba hace unos dias ...Soy una cobarde.
Años atras, no pensaba mucho en las consecuencias o peligros de ciertas actividades, no me preocupaba tal vez que me robaran (sería que no cargaba nada) o tal vez las calles estan más peligrosas en Lima
Y es que antes, era impensable que suba un delincuente a un bus lleno en hora pico e intente asaltar a los pasajeros a punta de pistola .
O que te sigan en una moto para romper la luna del lado donde estas y llevarte el celular...
O que, andando por la calle, se bajen unos tipos de un carro, para quitarte un miserable celular o mp3, cuando la gasolina que gastan dando vueltas al buscar víctimas, parece ser más de lo que conseguiran.
Despues de algunas malas y miserables experiencias (miserables por que asi me hicieron sentir) me he vuelto hipersensitiva a los peligros y es que todo amago de alboroto ya desata en mì una sensaciòn de peligro, de urgencia mi cuerpo se tensa y el corazòn se me acelera...
Mientras uno crece, va sintiendo creo que tiene màs que arriesgar, años atras llegaba a casa muy tarde andando por las calles, por que sentia que no habia nada que me pudieran quitar (hablando en plata ) y me sentìa màs segura de mi misma, ahora estoy convencida que alguien podria considerar que lo que cargo encima, por poco que siga siendo, vale màs que mi vida y podria quitarme la segunda para quedarse con lo primero ...Tambièn he comprendido que la cosa no es tan lejana como parece y que el no me ha pasado nada, no significa nunca me va a pasar...aunque desde antes que me sucedan las cosas ya lo habia notado.

No puedo negar que a veces me ha ayudado bastante este amiguito que vive en mi cerebro, pero muchas veces es estorboso, incómodo y lo unico que hace es arruinarte la tranquilidad.
Tal vez algún dia vuelva a ser valiente, por el momento esta Minina se va debajo de la cama a acurrucarse al menor sonido nocturno, a esperar que aclare y canten los pajaritos.
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